¡Nunca más como antes! #InternationalNursesDay

¡Nunca más como antes! #InternationalNursesDay

En el Día Internacional de la Enfermería, millones de enfermerxs de todo el mundo hacen un llamamiento a los gobiernos para que realicen gestos genuinos de solidaridad y se comprometan de una vez por todas con la Salud Pública Universal.

Con antelación al 12 de mayo, la ISP (la Internacional de Servicios Públicos es una federación sindical mundial que representa a 20 millones de mujeres y hombres trabajadores que suministran servicios públicos esenciales en 163 países) hace un llamamiento a los sindicatos y a la sociedad civil para que firmen nuestro Manifiesto y se movilicen en la demanda de salud pública universal de una vez por todas.

{source}

<iframe width=”560″ height=”315″ src=”https://www.youtube.com/embed/_qnmvMffe0k” frameborder=”0″ allow=”accelerometer; autoplay; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture” allowfullscreen></iframe>

{/source}

Mientras nos reconstruimos de la crisis, debemos transformar la forma en que las sociedades están organizadas. Debemos organizar nuestras sociedades en torno a la capacidad de asistencia. Cuando el cuidado y el bienestar de todas las personas sea el principio organizador central de una sociedad, en lugar de la capacidad de extraer y aumentar las ganancias y el consumo, toda la sociedad prosperará. Todxs debemos reconocer el lema sindical “¡Tocan a unx, nos tocan a todxs!” (Touch One Touch All) – si nuestros sistemas de salud no pueden cuidar de todxs, todxs estamos en riesgo.

Cuando los gobiernos presentan su respeto al personal de enfermería hoy en día, les pedimos que reconozcan los siguientes principios fundamentales;

  • El propósito más importante del gobierno es organizar la sociedad para que todxs puedan ser asistidxs.
  • No podemos continuar tolerando la perversa práctica de extraer ganancias de la mala salud.
  • La atención de la salud nunca debe depender de la capacidad de pago.
  • El comercio debe mejorar la capacidad de las naciones para proporcionar una atención pública de la salud de calidad, no restringirla.

Hacemos un llamamiento para que:

  • Los gobiernos trabajen con el personal de enfermería y sus sindicatos para elaborar planes de reconstrucción de la salud pública
  • Los gobiernos eliminen todos los obstáculos, incluidas las normas de propiedad intelectual, de los acuerdos comerciales existentes y las normas que impiden el acceso oportuno y asequible a los suministros médicos, como medicamentos, dispositivos, diagnósticos y vacunas que salvan vidas, y la capacidad de los gobiernos para adoptar las medidas necesarias para hacer frente a esta crisis
  • Todos los gobiernos apoyen la propuesta del Gobierno de Costa Rica de desarrollar un fondo común mundial de COVID-19 para todas las investigaciones, datos, tecnología, tratamientos y vacunas relacionados con COVID-19 como un recurso mundial compartido no patentado
  • El Banco Mundial deje de proporcionar fondos de la salud pública a la industria de la salud privada y que la Corporación Financiera Internacional deje de promover la privatización de la salud, que incluye el defectuoso modelo de las asociaciones público-privadas
  • El FMI deje de ordenar a los gobiernos que recorten el gasto público y los salarios del sector público
  • Todos los sindicatos y las organizaciones de la sociedad civil se movilicen en la demanda de la salud pública universal de una vez por todas.

La Asamblea Mundial de la Salud de las Naciones Unidas resolvió celebrar a lxs enfermerxs y parterxs declarando el año 2020 como el Año Internacional del Personal de Enfermería y de Partería. El 12 de mayo de este año se cumplen 200 años del nacimiento de Florence Nightingale y el nacimiento de la enfermería formalmente reconocida en la salud pública.

Este año, más que nunca, en medio de la pandemia de COVID-19, el personal de enfermería debe ser celebrado y reconocido no como “héroes anónimos”, sino como profesionales que merecen el respeto de toda la sociedad y son dignos de protección y de salarios decentes.

La crisis de COVID-19 se ha visto agravada por años de falta de financiación de los sistemas de salud pública y el virus ideológico del neoliberalismo.

Los sindicatos que representan a lxs enfermerxs y lxs trabajadorxs de la salud, las organizaciones y sus miembros, que se enumeran a continuación, quieren que el Día Internacional de la Enfermería 2020 marque el día en que los gobiernos se apartaron de la fracasada y peligrosa ideología del neoliberalismo y de la austeridad, y en su lugar se comprometieron a reconstruir las economías mediante inversiones a gran escala en la salud pública universal.

La pandemia ha demostrado lo esenciales que son lxs trabajadorxs de la salud pública para nuestra supervivencia. Sin embargo, el personal de enfermería está siendo peligrosamente sobrecargado de trabajo, reciben equipos de protección inadecuados, sufren traumas y estrés, han sido agredidxs y abusadxs, e incluso están siendo desalojadxs de sus hogares.

En una encuesta a los sindicatos de la salud realizada por la Internacional de Servicios Públicos (ISP), el 56,5% de los encuestados indicaron que lxs trabajadorxs no habían recibido el equipo de protección adecuado durante la pandemia de COVID-19. Si bien no conocemos la verdadera cifra de cuántxs trabajadorxs de la salud han sido infectadxs, sí sabemos que cientxs ya han muerto.

La crisis de COVID-19 se ha visto agravada por años de falta de financiación de los sistemas de salud pública y el virus ideológico del neoliberalismo.

Mientras que la industria de la salud es una de las industrias de mayor crecimiento en todo el mundo, la financiación pública para los servicios de salud pública esenciales no está satisfaciendo las necesidades. En demasiados países, la financiación pública de la salud está siendo consumida por los costos inflados por la industria médica. Demasiadxs enfermerxs y otrxs trabajadorxs de la salud son empleadxs con contratos a corto plazo o inseguros. Ahora es el momento de reconocer que los salarios y las condiciones precarias ponen en peligro la salud pública.

Los sistemas de salud no habrían estado tan poco preparados para la pandemia si hubieran contado con la financiación adecuada, si los gobiernos hubieran legislado para establecer una proporción adecuada de enfermerxs por paciente y si los países se hubieran asegurado de tener la capacidad productiva necesaria para la producción de EPP, equipo médico, investigación médica y producción de vacunas y tratamientos.

En su informe recientemente publicado, Situación de la enfermería en el mundo, la Organización Mundial de la Salud determinó que, incluso antes del brote de COVID-19, el mundo necesitaba 6 millones de enfermerxs adicionales para satisfacer las necesidades mínimas de salud. Los gobiernos deben ampliar los fondos destinados a la educación y capacitación en enfermería y no depender de la importación de enfermerxs de países que también están luchando por satisfacer sus propias necesidades de salud pública. La mejor manera de atraer y retener al personal de enfermería es reconocer el valor social de su trabajo, ofrecerles salarios justos y garantizarles un nivel de dotación de personal adecuado.

La salud pública mundial y el derecho individual a la salud sólo pueden lograrse si todos los elementos de los servicios de salud pública se adquieren, se gestionan, se dotan de personal y se prestan a través de un sistema público, desde la vigilancia de la salud pública, la investigación sanitaria, los diagnósticos y los datos sobre la salud, hasta la atención terciaria y el suministro de medicamentos.

Los fondos para la salud pública no deben ser obtenidos de otros servicios públicos. Tampoco se debe obligar a los países en desarrollo a contraer una deuda adicional. En cambio, pedimos la reforma de las normas fiscales y financieras nacionales y mundiales que actualmente permiten que 30 billones de dólares se escondan en paraísos fiscales. Cuando las empresas multinacionales y los multimillonarixs utilizan medidas de evasión fiscal, están socavando deliberadamente nuestro sistema de salud pública y se niegan a contribuir a los sueldos del personal de enfermería, lxs trabajadorxs de la salud y otras personas que prestan los servicios públicos necesarios para el funcionamiento y la salud de la sociedad.

Buscar

Últimas noticias