Correos antepone el negocio a la salud… (una vez más), y manda a trabajar al personal sensible. CCOO y UGT exigen que sigan protegidos.
Las autoridades sanitarias y el Gobierno advierten que la crisis sanitaria del coronavirus SARS-COV-2 sigue siendo una amenaza real, y del grave riesgo que representaría relajar las medidas preventivas, ya que nos arriesgamos a un rebrote de la pandemia.
En este contexto, CCOO y UGT vienen advirtiendo de las negativas consecuencias de la apresurada vuelta a la actividad completa que la empresa está implantando, en apenas tres semanas, y en el que existe un riesgo importante al no haberse acondicionado los centros para mantener las distancias de seguridad de dos metros.
En su afán “desescalador”, y a pesar de continuar vigente el estado de Alarma, la empresa (con el agradecimiento del CSIF que lo pidió expresamente) determinó la vuelta al trabajo de los mayores de 60 años el próximo 11 de mayo, y están presentándose muchos problemas en la gestión de las bajas para los trabajadores/as con patologías de riesgo al COVID-19 y también les están comunicando su incorporación.
Ante la falta de garantías, CCOO y UGT exigen que todo el personal sensible permanezca protegido y lejos del riesgo de contagio en tanto dure el Estado de Alarma.
La prioridad es proteger la salud y la vida de las personas, el negocio puede y debe esperar.
