Rurales ¿qué pasó con la seguridad?

Rurales ¿qué pasó con la seguridad?

Correos intenta tapar con pantallas faciales, exigidas hace meses por UGT y CCOO, la necesidad de abordar y pagar la seguridad de los vehículos.

En la reunión informativa del pasado 4 de mayo, la empresa anunció que “en breve” se abordaría una solución para el problema de seguridad en las aportaciones de vehículos de los rurales. Estamos ante una más de las promesas incumplidas por el presidente y su equipo, que a primeros de año hacía saltar todas las alarmas para abordar con inusual urgencia el “grave problema de seguridad” existente en el transporte de paquetería en los servicios rurales. Luego descubrimos que lo que realmente quería evitar, ante un eventual accidente, era una querella criminal al no cumplir Correos con su obligación: garantizar la seguridad. 

Solución propuesta por el señor Serrano: que el rural asumiese el coste de la seguridad de su vehículo y, en caso de no hacerlo, que asumiera la responsabilidad, eximiendo así al presidente que, mientras tanto, se gasta millones para venderse como el gran defensor de la España vaciada y da por buenos los 130 millones de financiación del Servicio Público Postal.

Pero, entonces, ¿ha desaparecido el problema? Pues no, el problema sigue donde ha estado siempre. Tras años de abandono del mundo rural postal y de convocar urgentemente hasta 3 reuniones monográficas, el presidente apostó por una SOLUCIÓN PARCIAL, CICATERA Y DISCRIMINATORIA, ofreciendo a un reducido grupo de trabajadores/as fijos (304), la posibilidad de solicitar voluntariamente que la empresa les facilite el vehículo, negando esa posibilidad a los más de 4.800 trabajadores/as fijos restantes, a los que se obligaba, al igual que a miles de eventuales, a adaptar sus vehículos particulares mediante “dispositivos homologados y validados de retención y aseguramiento de carga”. De esta forma, se cargaba la responsabilidad de la seguridad y el coste económico de la misma al trabajador/a, una IMPOSICIÓN que desde CCOO seguimos denunciando, porque ES ILEGAL.

 

UGT recuerda que la LPRL les obliga a evitar los riesgos a los trabajadores/as, al igual que les obliga a asumir el coste de cualquier medida preventiva, que nunca podrá ser a cargo del trabajador/a. El problema de las aportaciones en el mundo rural es un asunto complejo, que tiene una enorme dimensión económica y de impacto en las relaciones laborales, por lo que no puede imponerse una solución sin NEGOCIACIÓN, “eso” que también se les da tan mal, para lo que literalmente declaran no saber qué hacerNosotros sí sabemos lo que hacer y cómo hacerlo:

  • Opción voluntaria de vehículo de empresa para todos los trabajadores/as y respeto a los derechos retributivos adquiridos.
  • Subida del suplido y pago por la empresa de cualquier coste de las medidas de seguridad.
  • Negociación para buscar una solución. Si no, Conflicto Colectivo.

El señor Serrano debería saber que hay cosas esenciales para los trabajadores rurales que no se tapan con las pantallas faciales que, por cierto, aparecen porque UGT y CCOO tras tres reuniones de la Comisión de Salud, hemos obligado a Correos a adquirirlas. . el mundo rural es uno de  los pilares fundamentales que tiene la España vaciada. Son más de 5.000 rurales. Y merecen ser tratados con respeto y, sobre todo, sin engaños.

 UGT exige que se garantice la seguridad en la ‘España vaciada’ postal

 

Buscar

Últimas noticias