¡ASÍ NO SRA. CONSEJERA!

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El Sector de Enseñanza de UGT anima a la Sra. Consejera de Educación a que aproveche estos días de Semana Santa para que reflexione y encuentre la solución que ponga fin al caos en el que está sumida la comunidad educativa.

Nuestro Sindicato, como es de suponer, está recibiendo a lo largo de los últimos días numerosos comentarios de nuestra afiliación y simpatizantes sobre lo que está sucediendo y podemos asegurar, sin temor a equivocarnos, que existe un profundísimo malestar entre el profesorado, alumnado y familias.

Ya hemos trasladado en una anterior reflexión el ingente trabajo del profesorado que, con todas las dificultades del mundo y solo con sus propios recursos, ha puesto en marcha en tiempo récord una alternativa tecnológica docente que llega hasta donde puede, e incluso un poco más allá. Son increíbles algunos ejemplos de lo que se ha llegado a hacer para contactar con el alumnado. Para ellos y ellas nuestro respeto y admiración.

Desde el Sector de la Enseñanza de UGT, instamos a la Sra. Consejera a que recapacite porque en este contexto ser prácticos y primar lo esencial no nos parece una mala idea. Como tampoco lo es contar con las Organizaciones Sindicales a las que, hasta la fecha, se las informa a través de notas que se cuelgan en el portal de EDUCASTUR, a través de los medios de comunicación, o en el ámbito de la Junta de Personal Docente, ámbito donde por ley no se negocia nada.

Han sido numerosas las ocasiones en que UGT ha instado a la Sra. Consejera a reunirnos en los ámbitos correspondientes, con la intención de abordar esta crítica situación que tanto está alterando las condiciones sociolaborales del profesorado asturiano. La respuesta ha sido el silencio administrativo.

La comunidad educativa debe saber que, al menos con la UGT, no se ha negociado nada. Todas las decisiones se han tomado a espaldas de las Organizaciones Sindicales. Han sido decisiones unilaterales de la propia Consejería de Educación o consensuadas con otros organismos o instituciones. En ningún caso se ha reunido la Mesa Sectorial de Educación o la Mesa General de Comunidad Autónoma, únicos ámbitos en los que se produce la negociación con las Organizaciones Sindicales.

Que el profesorado vive en el desconcierto más absoluto es algo en lo que ya todo el mundo está de acuerdo. Se ha reaccionado tarde y mal. Las distintas instrucciones que se han ido publicando no han contribuido más que a aumentar la confusión. Las últimas, lejos de despejar las dudas, intentan ejercer un control a través del incremento de la burocracia a modo de sustituto falso de que se ha recuperado la normalidad. Y no, Sra. Consejera, esta situación no es normal. Se está intentando sustituir la burocracia habitual por una virtual basada en ese absurdo convencimiento que habita en algunos gestores de que el profesorado trabajo poco y que, por tanto, hay que controlarlo.

Tratar de dar por finalizado el curso de manera práctica o, si se me permite, de manera digna, puede ser un objetivo deseable que entre todos podamos alcanzar. Para ello la sensatez tiene que abrirse paso en el actual contexto. Ponerse ahora a calificar, evaluar o usar el SAUCE como si nada hubiera pasado es absurdo. Porque claro que  ha pasado, vivimos en una emergencia sanitaria por pandemia y se ha declarado el Estado de Alarma en el país.

Sensato es ponerse ahora a pensar a medio plazo en cómo mejorar el teletrabajo y el teleaprendizaje, pero como enseñanza de esta crisis, no como aluvión ahora en un mes.

Sensato es pensar en cómo se lucha contra las desigualdades y cómo se trabaja en una verdadera igualdad de oportunidades para nuestro alumnado, más allá de lo que se escribe en los programas electorales. Porque ahora nos hemos dado cuenta de la brecha digital, pero esta y otras ya existían antes del confinamiento.

Ojalá esta terrible crisis nos permita aprender y corregir errores. La educación, Sra. Consejera, es un derecho no un privilegio. No podemos permitirnos el lujo de una educación pública que no esté preparada. Cambiar las condiciones es responsabilidad de los políticos y estos tienen que hacer política, todos los políticos, pero los de izquierdas sobre todo.

Nadie duda de que vivimos una situación muy compleja, pero es a la Sra. Consejera, y solo a ella, a la que le competen determinadas funciones. Y sí, Sra. Consejera, aproveche estos días para reflexionar porque ¡ASÍ NO!, ¡ASÍ NO SRA. CONSEJERA!

Maximina Fernández Otero

Secretaria del Sector de Enseñanza

FeSP-UGT Asturias

 

 

 

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