Los datos son demoledores: cada día 1.137 personas sufren un accidente laboral en España y 2 personas fallecen como consecuencia de ello. Así en 2021 se produjeron 1.137.523 accidentes de trabajo, y 705 fueron mortales. Una cifra terrible que sigue la tendencia de los últimos años y que, si no se pone remedio, volverá a producirse este. Cabe recordar que desde 2013 hasta 2021 han muerto en accidente laboral 5.935 personas.
Ana García de la Torre y Eduardo Magaldi, que han presentado la Guía operativa de prevención de riesgos laborales y analizado los datos de siniestralidad de 2021, confían en que la reforma laboral, que apuesta por la estabilidad del empleo, ayude a combatir la siniestralidad laboral.
García de la Torre ha señalado que “la salud laboral sigue siendo la asignatura pendiente en las empresas y en las políticas de nuestro país” y ha vuelto a demandar al Gobierno que convoque, de manera urgente, una mesa de diálogo social para atajar la siniestralidad laboral. Se debe elaborar un Plan de Choque integral que aborde todos los tipos de accidentes, no solo los mortales, que incluya las patologías no traumáticas, que son la primera causa de accidente laboral mortal en nuestro país y con los suficientes recursos. En este sentido, ha dicho que el Plan de choque contra la accidentalidad mortal, elaborado por el Ministerio, se queda corto.
García de la Torre ha pedido también medios suficientes para la futura Estrategia de Seguridad y Salud en el Trabajo 2022-2027, porque “invertir en prevención repercute en las propias personas trabajadoras, en las empresas y en la sociedad en su conjunto”.
Además, para que se cumpla la normativa de prevención en las empresas es necesario reforzar la Inspección de Trabajo con el objetivo de establecer, tal y como recomienda la Organización Internacional del Trabajo, 1 inspector por cada 10.000 personas trabajadoras. Ha propuesto, también, limitar la masiva externalización de la gestión preventiva y crear la figura del Delegado/a territorial y o sectorial de prevención para mejorar la seguridad y salud laboral en las pymes.
Prevenir la precariedad y los riesgos psicosociales en las empresas
Tanto Ana García de la Torre, como el Portavoz de RUGE, Eduardo Magaldi, han vinculado la precariedad y la siniestralidad laboral. Una precariedad que afecta, sobre todo, a los trabajadores y trabajadoras más jóvenes. En 2021, las personas trabajadoras jóvenes, entre los 16 y 35 años, sufrieron 137.069 accidentes de trabajo con baja en jornada laboral, lo que supone el 28% del total. 588 fueron accidentes graves y 53 mortales. Además, se produjeron 25.133 accidente in itinere, de los que 36 fueron mortales.
El mayor número de accidentes con baja entre jóvenes se registra entre dependientes de comercios, asalariados en restauración, peones de construcción o cuidados de personas, entre otros.
La siniestralidad laboral que padecen los trabajadores jóvenes tiene relación con las condiciones del mercado laboral: concatenan contratos temporales, lo que provoca falta de experiencia o formación en el puesto de trabajo; muchos de ellos realizan gran cantidad de horas de trabajo, tienen bajos salarios, horarios irregulares y menor participación en la acción colectiva.
Por eso, es necesaria esta guía elaborada por RUGE, en colaboración con la Secretaria de Salud Laboral de UGT, que pretende ayudar a aumentar la seguridad y salud en el trabajo, e impulsar la protección de las personas trabajadoras, en especial de los más jóvenes, que deben conocer sus derechos y tener la formación necesaria para minimizar los riesgos laborales. Para consultar más datos acceder a los siguientes informes: