El Sindicato propone un Pacto que permita el retorno con seguridad a la prestación del Servicio Público.
El Sector AGE de la FeSP-UGT ha propuesto a la Dirección General de Función Pública la negociación de un Plan de Contingencia o Protocolo General de Seguridad y Salud para la Administración General del Estado que contemple la adopción de las medidas preventivas necesarias que permitan el retorno al Servicio Público con seguridad para las y los trabajadores que lo prestan y para la ciudadanía, a partir de la finalización del estado de alarma.
La adaptación de los puestos, la relación con la ciudadanía y entre los propios trabajadores, así como las medidas de seguridad necesarias, pueden y deben ser consideradas previamente para que estén dispuestas con anticipación a lo que viene llamándose el periodo de desescalada o deshibernación.
En este sentido, con el objetivo de constituir un entorno laboral seguro y continuar prestando un servicio de calidad en los centros de trabajo de la AGE, UGT propone la implementación de, al menos, las siguientes medidas:
- Planificación de tareas y procesos para que pueda mantenerse la distancia de seguridad interpersonal recomendada, tanto en la entrada y salida al centro de trabajo como durante la permanencia en el mismo.
- Publicitar y difundir los procedimientos de higiene recomendados por las autoridades sanitarias, así como proveer al personal de los productos necesarios para seguir las recomendaciones individuales.
- Extremar la limpieza y desinfección de los lugares de trabajo, mobiliario y enseres, así como los sistemas de ventilación.
- Disponibilidad por parte de las y los trabajadores de medios y equipos de protección individual necesarios y adecuados al riesgo.
- Implementar en los centros abiertos al público medidas para minimizar el contacto entre personas trabajadoras y público. El aforo máximo deberá permitir cumplir con el requisito de distancia interpersonal. Se potenciará el uso de carteles y señalización que fomente las medidas de higiene y prevención.
- Mantenimiento y fomento del teletrabajo, abordando de inmediato su regulación.
- Disponibilidad de test de detención de virus en los centros de trabajo y establecimiento de protocolos en caso de que una persona manifieste síntomas para protegerle y proteger a los demás.
- Tratamiento específico para minimizar el riesgo de los trabajadores especialmente sensibles o vulnerables.
Por último, instamos a Función Pública –dada la suspensión temporal de las reuniones de las Mesas Delegadas- a articular un procedimiento que permita extender y adaptar estas medidas a los distintos Ministerios y Organismos, en la certeza que es en el ámbito más cercano donde se aportarán propuestas con mayor precisión.
La reincorporación al trabajo debe guiarse por el principio de minimización del riesgo e ir pautada por un seguimiento estricto de criterios preventivos sino se quiere que se produzca una dramática vuelta atrás.